Wednesday, June 1, 2011

EL IMPERIO ATACA -

Con profunda indignación, conocimos el anuncio del Departamento de Estado de USA, de aplicar sanciones a varias empresas que tienen relaciones comerciales con Irán y en particular, contra PDVSA, la empresa estatal petrolera de la República Bolivariana de Venezuela.

El bloque imperialista -yanqui, europeo, japonés- está desesperado, frente a la crisis económica por la que atraviesa y por la pérdida gradual de su hegemonía a nivel mundial. Es inocultable el mayor dinamismo económico y la disputa política y diplomática que están adelantando otros países, que han llamado emergentes.

La guerra, razón de la vida imperialista

La incontrovertible ventaja imperialista, está en el campo militar y por eso acude a la guerra, como su mecanismo principal, para seguir ejerciendo el dominio mundial y para apropiarse de los recursos que exige su depredador e insostenible “modo de vida americano”.

El saqueo, principalmente de los recursos mineros energéticos, el control de las fuentes de agua dulce y la biodiversidad, se ha vuelto una urgencia para los países industrializados y más dramáticamente para los gringos, pues están consumiendo cuatro veces el petróleo que producen.

Por eso se invadió a Irak y Afganistán, se está invadiendo a Libia, se amenaza y agrede a Irán y Venezuela, se mantiene la hostilidad contra todos los países poseedores de los recursos naturales, independientemente de los pretextos que se inventan para publicitar cada guerra.

La invasión a Irán

Existe el riesgo que las guerras contra Corea o Irán se conviertan en conflagraciones nucleares, donde además estarían comprometidas otras potencias como Rusia y China, con consecuencias catastróficas para todo el planeta.

Por eso, se intenta hacerle un bloqueo económico a Irán, similar al que han montado contra Cuba. Sin embargo, la importancia económica por ser el país con las terceras reservas de petróleo y la ubicación geoestratégica de Irán, lo convierten en un objetivo más difícil de estrangular.

Venezuela en la mira

El gobierno del presidente Hugo Chávez, tuvo el atrevimiento de volver a organizar a los países productores de petróleo y de resucitar la OPEP, fijando otras reglas de juego en el mercado energético. Además, Venezuela se convierte en el país con las mayores reservas probadas de petróleo, al verificar 295.000 millones de barriles, faltando por homologar varias zonas de la Faja del Orinoco. Eso es un bocado muy apetecido por la voracidad imperialista.

Venezuela es protagonista en la nueva dinámica continental, en donde se ha puesto límites a la expoliación imperialista y, se construye otras relaciones de cooperación, complementariedad y solidaridad entre los pueblos.

Los intereses imperiales están muy ofendidos con esta nueva realidad geopolítica y han empezado con su primera parte, las sanciones, para ir gradualmente ajustando su plan, hasta tratar de llegar a su ya planeada intervención militar, para acabar con el gobierno revolucionario en Venezuela. Así se golpearía a la OPEP, al ALBA y a los demás países que tienen gobiernos democráticos, populares y alternativos en la región.

Las sanciones imperiales

Demasiado vergonzosa fue la postración servil del Congreso gringo, frente a la visita que le hizo el desafiante Primer Ministro Israelí, el genocida Benjamín Netanyahu, negando el acatamiento a las resoluciones de la ONU de reconocer el Estado y las fronteras Palestinas. Eso evidencia que los verdaderos dueños de USA, son los judíos sionistas que controlan el sistema financiero, bursátil, mediático, el complejo industrial militar y otras actividades fundamentales de esa economía.

En contraste, es grosera y engreída la pretensión del parlamento yanqui, de imponer sanciones a quienes negocien con Irán y en especial contra Venezuela.

Rechazamos enérgicamente esas pretendidas sanciones imperialistas, porque son violatorias al Derecho Internacional, son una descarada violación a la soberanía de los pueblos y una injerencia en los asuntos internos de los otros países.

Nos sumamos a las manifestaciones de los pueblos, que hacen respetar su soberanía y su dignidad.


Autor - anónimo

No comments:

Post a Comment